Corriendo hacia Rio

Argentina, Brasil, Chile, Colombia, y una gran cantidad de países de América del Sur se hicieron presentes para la versión 2015 de la Maratón Internacional de Viña del Mar, el pasado 4 de octubre.  Sumando entre las tres categorías presentes, 10, 21 y 42 km, más de 8 mil inscritos, llenando el famoso balneario de Reñaca, el cual se ubica a unas 2 horas en dirección oeste desde la capital de Chile, Santiago.

Aunque se tratase de una corrida más de clase familiar, dada la mayor participación en los 10 y 21 kilómetros, 7 mil inscritos versus mil en los 42, las figuras nacionales no faltaron.

Siendo las 6 de la mañana de un domingo y no habiendo dormido lo suficiente, no sé como logré despertarme a esa hora, pero todo sea por las fotos, ¿no? Media hora entre despertar y tomar un desayuno liviano, estoy en el auto camino a Reñaca, por suerte solo a unos minutos de mi casa. Llegando a esta famosa playa de verano; y un furor para los turistas; hay mucha actividad. Me sorprende el cambio que ha habido en los últimos años hacia el deporte por parte del público chileno, el cual se integra cada vez más a este hermoso mundo.

Una de las figuras más prometedoras fue Érika Olivera, quién quedó a 10 segundos de la marca para los Juegos Olímpicos de Rio 2016. A pesar de esto, segúnla información de su GPS, el recorrido de la carrera era casi 300 metros más largo que una maratón estándar, con una longitud de circuito de 42.200 metros, es por ello que apeló frente a la Federación Internacional de Atletismo, IAAF por sus siglas en inglés.

Si bien no trabajé para ningún medio oficial, fue una buena oportunidad para soltar la mano en otro deporte, uno COMPLETAMENTE distinto a lo que estoy acostumbrado a trabajar. Para los interesados en fotografía, video o incluso cualquier otra área, les recomiendo este ejercicio visual y práctico de colocarse en situaciones incómodas o fuera de su zona de confort, ya que te obliga a pensar de manera distinta, probar, buscar esos ángulos que dan bien sea en la foto, video, o lo que sea, como podrán ver a continuación:

Finalmente, creo que puedo decir que logré lo que buscaba, claro que cerca del final de la carrera, en donde me pude apartar de la masa de fotógrafos que había entre la meta y los primeros 3 a 4 kilómetros de la pista, llegando así a la zona de los 40 kilómetros para obtener una que otra toma interesante, simetrías, detalles, cansancio, apoyo, motivación y su merecido descanso.

Nos vemos en el camino!

Felipe