Le dedicas tiempo a tu perro?

 

Siendo joven, o no, a veces es complicado saber dónde estás colocando el tiempo que tienes.

Es cosa de distraerse un instante, y años han pasado, dejándote un tanto boquiabierto de lo que has cambiado, y de lo gordo que se ha puesto tu perro.

Suponiendo que te preocupas por él, cuándo fue la última vez que salieron a pasear? Que lo dejaste disfrutar ensuciarse, incluso si eso significó tener que pasar vergüenza frente a tus amigos por la idiotez que hizo?

Nuestro eterno presente pasa cada vez más rápido. Cómo lo controlamos, o tomamos el timón del reloj de arena?

Haz una pausa, mira a tu perro, trata de entender lo que te dice moviendo la punta de la cola, y colocando cara de pena, cosa que siempre le sirve para conseguir lo que quiere, y sal con él. Guárdate esos espacios para compartir, y protégelos, que una vez que el último grano de arena caiga…